El grupo de investigación ACBiodiv, de la Universidad de Santiago, avanzó esta semana en el proyecto 'Un pavimento botánico para Santiago de Compostela' que cuenta con la colaboración del Consorcio de Santiago en el marco del programa 'A pedra que pisas' de mantenimiento de los pavimentos de la ciudad histórica compostelana.

En este caso, los responsables del proyecto trabajaron en nuevas áreas de estudio en una de las entradas al casco viejo, concretamente en la Plaza de Fuenterrabía.

Miembros del Departamento de Botánica de la USC, bajo la dirección del profesor Miguel Serrano, comenzaron a instalar en las juntas de los enlousados, previamente acondicionadas por los canteros, diversas combinaciones de plántulas y semillas de especies vegetales resistentes al tránsito, habilitadas con sustrato apropiado.

Combater o cambio climático

El objetivo de estos trabajos es estudiar el comportamiento colonizador de las plantas en las juntas entre las losas de pavimento y su eficacia para amortiguar la temperatura ambiental durante las olas de calor extremo, cada vez más frecuentes en verano, en el camino de combatir los efectos del cambio climático.

Este proyecto se enmarca dentro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS de la ONU) para conseguir una ciudad histórica que integre el micropaisaje verde con el entorno pétreo de la urbe y donde la flora vuelva a ser un elemento constante del tejido urbano, característico del paisaje urbano histórico de Santiago de Compostela.

A pedra que pisas

El Consorcio de Santiago cuenta con el programa 'A piedra que pisas' que desde 2007 trabaja con la intención de aglutinar las iniciativas y acciones encaminadas a mejorar el conocimiento de los pavimentos históricos de la ciudad, así como a estudiar y optimizar los instrumentos de intervención destinados a su reparación, mantenimiento y conservación.

El programa se orienta a la puesta en valor de los más de 60.000 metros cuadrados de enlosados de granito de la Ciudad Histórica de Santiago de Compostela. Diferentes equipos de trabajo, integrados por canteros especializados en la conservación de pavimentos históricos, reparan y mantienen a lo largo del año las calles del casco histórico con actuaciones planificadas por la Oficina Técnica del Consorcio de Santiago.