En el marco del programa de restauración de monumentos del Consorcio de Santiago, el organismo interadministrativo va a iniciar las obras de reparación de las cubiertas de la iglesia de San Martín Pinario, por un importe global de 114.950 euros. La empresa adjudicataria es Rehabita Gestión Integral de Rehabilitaciones y Restauración, S.L. Se prevé que la intervención se finalice en un período de cuatro meses.

El responsable de este proyecto es el arquitecto de la Oficina Técnica del Consorcio de Santiago Ramón Fernández Hermida. Explica que el objetivo principal de esta actuación es evitar la entrada del agua de la lluvia hacia el interior de los muros de las capillas de Nuestra Señora del Socorro, Santa Catalina y Santa Escolástica. “Se intervendrá en sus cubiertas, al tiempo que se realizará una limpieza y rejuntado de sus fachadas y de las fachadas de la nave central de la iglesia que son accesibles desde estas cubiertas, junto a otras obras menores” -señala-.

El arquitecto indica que la teja se encuentra en muy mal estado, con falta de muchas piezas y otras muchas rotas; además, hay una gran cantidad de vegetación que obstruye los canales. “Aun así, y dado que las placas de fibrocemento que hay por debajo de la teja están en buen estado, la mayor entrada de agua al interior de los muros se produce por los encuentros de los faldones de las cubiertas y los muros verticales de la iglesia” -afirma-.

Las fachadas presentan abundante suciedad y están invadidas por la vegetación

Según el arquitecto, el estado de la piedra de las fachadas es bueno, aparentemente no hay pérdidas de material. La fábrica es de buena factura y no se perciben tampoco fuertes deformaciones ni grietas. No parece estar la piedra meteorizada por causa de agentes atmosféricos, contaminación… No obstante, se perciben zonas que invadió la vegetación y áreas colonizadas por mohos y líquenes y, en general, con abundante suciedad. En determinadas zonas los rejuntados de la piedra están desprendidos o no existen.

Los pináculos que están a la derecha de la fachada de la iglesia tienen unos anclajes deficientes que no aseguran su estabilidad, por lo que se repararán. También se arreglarán las barandas de balcón del cuerpo de las escaleras, que presentan un alto grado de oxidación.